martes, 6 de mayo de 2014

DE TODO UN POCO

Llevo unos días donde cualquier imprevisto es más que posible. Las sorpresas, buenas y regulares, se suceden una tras otra. La peor fue cuando el ordenador empezó a fallarme el viernes pasado y el sábado se desmemorió defnitivamente. Menos mal que fui precavida y pasé a una memoria externa todos los documentos, que ya me ocurrió con mi primer ordenador, allá por el final de los años ochenta del siglo pasado (qué mal suena eso, parece una un dinosaurio de épocas pleistocenas), el perder todo lo que contenía y no me arriesgo a llevarme semejante disgusto de nuevo. El asunto se ha solucionado con la compra de un nuevo ordenador, que el antiguo estaba ya muy viejito y lleno de achaques. Ahora, toca habituarse al nuevo entorno. Eso sí, es como si hubiera pasado de conducir un Seat a conducir un Ferrarri (en la vida real, conduzco un Ibiza, no presupongáis un lujo del que carezco).

Pero, como he dicho, también he tenido maravillosas sorpresas que me han alegrado los días. Hace un par de meses decidí encargar y pagar copias impresas de mis libros editados en Amazon, que son muchos los que no desean abrirse cuenta en la inmensa plataforma y prefieren que yo se los envíe dedicados directamente. Uno de los últimos encargos que he tenido ha sido hecho por el amigo Francisco Espada Villarrubia, que lleva el blog Días de aplomo. Pues bien, el indicado amigo Francisco me ha sorprendido en tres ocasiones desde su blog, ya que tuvo los detalles de dedicarle un poema a mi novela Aroma de vainilla, de confeccionar otro poema con los títulos de mi libro de poesía Lunas de ausencia y hoy nos ofrece un hermoso poema titulado Balcón de sueños, que recomiendo leer, con el encabezado de un par de versos de Lunas de ausencia.
También ayer tuve una hermosa sorpresa de la mano de otro Francisco, Francisco Jesús Portela León, que, en su blog de reseñas literarias Un lector indiscreto, tuvo el detalle de incluir a Aroma de vainilla como una de las novelas que ha leído y reseñado en el género de sagas familiares. Su reseña aún la recuerdo, muy completa y elaborada. Por si a alguien le interesa, aquí dejo el enlace. 
Y no quiero acabar esta entrada que parece la crónica de un diario personal (que tampoco pasa nada porque así lo sea, ya que, al fin y al cabo, este es mi blog), sin anunciar que mañana miércoles, 7 de mayo, tendrá lugar en el Museo Ramón Gaya de Murcia, Plaza de Santa Catalina, s/n, la presentación del poemario de María José Sánchez Vázquez titulado Donde aguarda la luz. Os animo a todos los que estéis en Murcia o alrededores a acudir al acto para disfrutar de la hermosa poesía de María José, cuya calidad literaria podéis contrastar en su blog El vaho en los espejos. Yo tendré la suerte de acompañarla en la presentación junto al amigo José Cantabella.