Todo es finito y el tiempo se encarga de enseñarnos la lección. Nunca iguales, somos uno y los otros que nos habitan: los del pasado y los del futuro.
Miro las hermosas ruinas y me pregunto qué quedará de nuestra cultura. Cuando era muy joven creía que la humanidad siempre avanza; ahora, sé que puede retroceder y olvidar durante siglos las conquistas del pensamiento.
Más vale olvidarse de lo que hace daño y paraliza. Los soñadores nunca entenderán las guerras de intereses de los emprendedores. Los emprendedores mueven el mundo presente. Los soñadores edifican los cimientos del mundo futuro.
Fotografías de Isabel Martínez Barquero
Capiteles corintios en el Olimpión o templo de Zeus Olímpico, en Atenas
Estatuas del Museo de Ostia Antica
El mundo avanza gracias a los soñadores y los que creen en las utopías.
ResponderEliminarLos emprendedores destruyen lo que los otros han creado.
Tu pensamiento me consuela.
También creo que no hemos avanzado tanto. Al menos en lo que a humanamente se refiere.
Gracias, Isabel.
Me duelen las heridas.
Me duele hasta el canto de los pájaros que tan alegremente vibra en mi ventana.
Hoy me duele todo.
esa idea de que atemporalmente todos viven de una manera u otra en este momento, eso somos un amasijo de personajes con ruinas, sin ruinas, hoy de día, y en un momento la oscuridad absoluta, un fuerte abrazo
ResponderEliminarPIenso que toda sociedad imperialista termina en polvo y ruinas.
ResponderEliminarInteresantes tu planteamiento y tus fotografías.
Saludos desde Copenhague, el puerto que ha sobrevivido mil años.
Ian.
Yo creo que “lo que hace daño” incita a soñar y en ese soñar surge destruir el mal. Los bienaventurados no sueñan, reprimen. Véase.
ResponderEliminarUn beso, Isabel.
Hasta ahora yo también creí que lo alcanzado, quedaba consolidado in aeternum; pero hoy me he dado cuenta que las mejoras conseguidas y que tantos años costaron, tan sólo en un segundo pueden saltar por los aires. Como la vida ¿cuántos años para aparecer? Y sin embargo a la muerte tan sólo un suspiro le basta. Perdona, Isabel, el pesimismo. Debe ser el calor, ¿el calor, o la crisis?
ResponderEliminarEl tiempo pasa de largo. Gira y no deja de girar, nos atraviesa en su movimiento circular. La humanidad está subida al tío vivo de la existencia, "El Samsara", se repite, pero poco evoluciona.
ResponderEliminarSerán los soñadores, o los que decidan bajarse de este sin sentido por sí solos, porque no depende de nada exterior.
Qué buen post Isabel, me ha gustado mucho este texto tuyo.
Un abrazo desde el Eternauta y desde mi corazón.
así es!!!!, nada ni nadie es como hace media hora atrás
ResponderEliminarla constante que nos moviliza es superior a todo
por eso uno nunca termina de conocer a su otro ni a su mismo, y menos a los demás
pero somos animales tozudos y suponemos de otros algo y lo damos por hecho, entonces les clasificamos y le subimos a una repisa imaginaria, y desde entonces cada vez que nos acordamos de alguien, vamos a esa repisa y predisponemos el ánimo por que suponemos que encontraremos al sujeto del mismo modo que le dejamos.
Besitos y mil felicidades
Ojalá emprender fuera un sinónimo del soñar más inofensivo, del latido común.
ResponderEliminarUn beso, Isabel.
¡¡Si, es mejor olvidarse de lo que nos hace daño.
ResponderEliminarFeliz domingo amiga Isabel.
Ay! isabel: No quiero ni imaginar, lo que seremos capaces de legar a nuestros descendientes. Aunque me lo puedo imaginar. Montañas y montañas de basura. Plásticos. Aluminios. Nada bueno. Retroceder es lo más suave que se me ocurre, y de la conquista del pensamiento, habrá muy pocos soñadores
ResponderEliminarque se dediquen a cultivar las ideas. Serán absorbidos seguramente por una legión de emprendedores-estafadores.
No se puede negar, que tengo una moral alta eh?. (jajaja)
Un fuerte abrazo, amiga mia.
soñar y emprender no son disímiles(diferentes)
ResponderEliminarpodrían complementarse absolutamente
destruir es una forma de crear
no se hacen tortillas sin romper huevos...
vivimos en un planeta violento absolutamente, las fuerzas geotectónicas así como las atmosféricas están fuera de todo nuestro control
besitos
No podría estar más de acuerdo con las reflexiones que nos regalas, Isabel.
ResponderEliminarNada me resulta más decorazonador que los pasos atrás que damos como civilización. No hay más que ver el mundo islámico de hoy y el de hace quinientos años, las culturas de los indios precolombinos y las actuales, los pasos atrás que -escudados en la crisis- estamos dando en nuestros derechos.
Un abrazo,
Estas reflexiones son propias de los momentos que vivimos. Al menos ese retroceso que se palpa, que padecemos, da lugar al desencanto.
ResponderEliminarNos queda, a los soñadores, seguir soñando pero activamente. Para que no se quede en suenos.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Nuestra herencia como están las cosas, serán magníficos desiertos, ríos secos, playas rodeadas de hormigón... y muchos sueños y utopías escritas en libros, espero que alguien deje alguna mención de los soñadores...
ResponderEliminarLos soñadores sólo perciben la vida de otra forma y, así, construyen una nueva realidad.
ResponderEliminarUn beso. Me gustó mucho esta entrada.
Me pregunto en que lado estaría, por ejemplo, Marco Polo ¿soñador o emprendedor?
ResponderEliminarParece que estamos en perpetua reconstrucción, ¿verdad, Isabel? Creo que en eso sí que nos parecemos soñadores y emprendedores. Un abrazo
ResponderEliminarUn cincuenta por cien de cada uno estaría muy bien y sería el ser humano perfecto. ¿No crees?
ResponderEliminarBicos
Avanzamos, la humanidad avanza, quizá en un minuto se destruya todo, pero de momento estamos avanzando y aunque a veces demos pasos hacia atrás, el paso hacia adelante siempre es mayor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me quedo con olvidar lo que hace daño y paraliza (siempre que se pueda);
ResponderEliminarel soñar implica ilusion y emprender implica acción...¿por qué no?...interesantes ambas cosas.
Recibe mis saludos y besos.
Creo que ambos, emprendedor y soñador, deben caminar en la misma dirección porque sólo con los sueños no saldremos de la situación que nos rodea.
ResponderEliminarY la pena es que estamos destruyendo lo que tanto ha costado construir.
(Sabemos que siempre amanece, pero cuesta creerlo ahora mismo)
Un abrazo cariñoso, Isabel.
Isabel:
ResponderEliminarEs curioso, pero ese mismo pensamiento podría ser atribuido a un cartaginés ilustrado, bastante antes de las guerras con los romanos...
Saludos.
La historia nos proporciona numerosos ejemplos de involuciones culturales, pero dificilmente la escuchamos. Recordemos, entre otros, los muchos siglos oscuros que sucedieron a la caida del Imperio Romano. Casi todos los fenomenos son recurrentes. Un abrazo, Isabel y buen verano.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo contigo Isabel.
ResponderEliminarMucho mejor olvidar todo lo que nos hace sufrir.
Un abrazo.
Muy oportuna la reflexión. Vivimos una constante marea, con su pleamar y su bajamar. Claro que avanzamos y retrocedemos. Pero prefiero pensar que damos dos pasitos pa delante y un pasito pa tras.
ResponderEliminarY todo gracias a los soñadores que ven concretado su sueño cuando lo emprenden y lo hacen realidad. Ocurre que la palabra emprendedor tiene también su matiz peyorativo.
Aunque leyendo tu magnífica reflexión se me ocurre que nuestras ruinas nunca serán tan hermosas como las que nos muestras. Un abrazo.
Estamos atados a hilos del presente. Un puente que solemos caminar con los ojos cerrados.
ResponderEliminarSaludos
No sé si olvidarse, pero si tener conciencia de que hace daño y paraliza. Adónde iremos a parar???
ResponderEliminarUn abrazo.
Cuantos pensamientos vienen a la mente al leer tus palabras,no me atrevo a decir si son positivos o pesimistas, aunque pensándolo bien quizás sean miedosos por el cambio que nos provoca la crisis en ésta nuestra Europa,que parece venirse abajo.
ResponderEliminarGracias por provocarnos el aletargado pensamiento crítico.
"Nunca iguales, somos uno y los otros que nos habitan: los del pasado y los del futuro."
ResponderEliminarEsa es nuestra trascendencia, saber que la vida es un testigo que nos continua y que no nos pertenece
A veces los utópicos cometemos un error de principio: hacemos poco caso de etapas de la historia de la humanidad que han sido tan negras que han retrasado miles de años la evolución y el saber.
ResponderEliminarUn realista utópico, algo bien inusitado, fue Eratóstenes que, como sabes, dos siglos a.n.e., calculó con precisión el radio de una esfera llamada Tierra y estudió astros y filosofía dejando un legado que, en la negrura de siglos y siglos, fue escatimado, negado y transformado en estúpidas teorías dictadas por el poder de la fe.
Creo que de nuestra estructura social no debería quedar nada para las generaciones futuras. De nuestras obras artísticas, posiblemente las realizadas por los soñadores, nunca por los oportunistas. Y de la ciencia, todo aquello que es motivo de disgusto e irracionalidad para quienes sin conocer nada, predicen unas consecuencias catastrofistas.
Un fuerte abrazo, querida Isabel.
Quisiera emprender un sueño. Y si no lo sueño no podría emprenderlo. Por eso prefiero moverme primero a través de mis sueños para pasar a la acción posteriormente. No sin antes cubrirme de una emoción que acompañe mis pasos para llegar a encontrar el punto medio. "Ayer tuve un sueño..." Seguimos soñando los soñadores sin dejar de emprender nuestros sueños. Siempre mucho para pensar en tus letras. Un abrazo grande, Isabel.
ResponderEliminarMe quedo con los soñadores en colectivo...hay muchos y habrá.Un beso
ResponderEliminarExquisita reflexión la de esta publicación!!!(el muchacho bien llorón y encima la mamá lo pellizca. Ja ja ja)
ResponderEliminarEl escrito plantea un abanico de temas a cual más interesante y filosófico.
La visión de finitud presente en su eterna tensión de bordes entre lo pasado y lo futuro y en la huella de las ruinas donde hubo determinaciones decisivas y grandes sueños que evidencian avances y retrocesos y no en la ilusión de la línea férrea de la historia.
Escrito que cuestiona la escala del progreso del saber y deja entrever el único interés latente del poder.
Recuerdo a Borges cuando afirma que "todas las teorías son válidas pero depende de lo que se haga con ellas"
Hay quienes convierten los sueños de la humanidad en verdaderas pesadillas, y puede ser por instantes, años o siglos.
De eso somos fieles testigos hoy, en la historia y en el presente, sin duda que en los años venideros será igual, si es que la humanidad sobrevive.
Abrazos Escritora!!!
"todas las teorías son válidas todo depende de lo que se haga con ellas"
ResponderEliminarProgresamos cuando el alumno es capaz de superar a su maestro, cuando la sociedad es capaz de mejorar respecto a su pasado.
ResponderEliminarTambién cuando en lugar de someterse es capaz de defender su presente.
Siempre que conservemos el respeto y el interés por quienes nos han precedido, habremos perdido poco. Lo malo será cuando hasta eso hayamos perdido. Entonces ya no habrá esperanza...
ResponderEliminarRetrocesos...
ResponderEliminarAvances...
Equilibrio ebtre dos sendas.
Un abrazo.
Como ya se dijo "que no nos quiten nuestros sueños", sin ellos ¿cómo avanzar?
ResponderEliminarBesos.
Cuando la mayoria se somete y la unica salida que propone es la de mirar para el otro lado para no sufrir, todo lo que hace esa mayoria es apoyar el desmadre que se nos viene encima.
ResponderEliminarTe dejo un interesante articulo por si te apetece leerlo.
http://real-agenda.com/2011/06/03/el-cartel-de-la-reserva-federal-las-ocho-familias/
Besos y se feliz!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMi querida amiga Isabel:
ResponderEliminarDebo comenzar mi comentario resaltando tu buen tino para la fotografía, eres fenomenal en este campo!
Bueno, la humanidad ha estado siempre dividida en su pensamiento y en sus apuestas teoricas basadas en la ciencia o en los dogmas. Me parece que en el mundo que vivimos los soñadores como yo o como tú, Isabel, podemos producir ideas que bien pueden ser aprovechadas (digamos de manera inescrupulosa) por los emprendedores para hacerlas realidad y no estaría mal eso, el problema estriba en que muchos emprendedores son oportunistas y mezquinos, sin escrúpulos morales. Estos son los que son capaces en nombre, por ejemplo del capitalismo ( los ideólogos del imperio estadounidense) o de la religión (el Vaticano o los Musulmanes), de llevarnos al ostracismo, a ser parias en nuestra propia tierra, a hundirnos en el lodo de la barbarie mientras ellos, pragmáticos de todas las aberraciones posibles, construyen un mundo excluyente solo para los privilegiados. Esto es lo que vemos hoy, es lo que sufrimos hoy en día: la moral no cuenta, la cultura es un salpicón incomible, el libre ejercicio de las ideas es comparable al terrorismo. Solo es válido el mundo unipolar y obecer con los labios y los ojos cerrados.
El mundo, me parece ya no está dividido entre los soñadores y los emprendedores sino entre soñadores y los oportunistas.
Te dejo un fuerte abrazo.
Es curioso comprobar cómo el crecimiento material, el sobrevalorado progreso, ese del que no se cuenta a costa de qué o de quienes se ha logrado, camina en línea ampliamente divergente con el progreso de la ética de la sociedad; claro que ahí está incluída mi propia ética personal. El propio olvido individual de los valores, de nuestras raices culturales. Dificilmente encontraremos el camino, si olvidamos de dónde venimos. Si no somos capaces de mirar atrás, recogiendo el bagaje que nos enriquezca y, viendo en qué piedras tropezaron otros, para poder sortearlas... ¿Cultura y prepotencia? No. No son un buen maridaje, ergo...
ResponderEliminarAbrazotes
Por otra parte, puede que haya un punto de compatibilidad. El soñador emprendedor. Parece imposible, pero no lo es. Teresa de Calcuta, médicos sin fronteras, numerosas oenegés, vuelta al trueque como manera de pago, pequeñas cooperativas...comercio justo, etc, etc. Claro, que entonces el progreso del asunto, tiene menos rendimiento material del que tendría un emprendedor a secas, pero, cuando esta dualidad se da, el mundo realmente avanza y hasta es mejor.
ResponderEliminarUna bella reflexión, y creo que todo depende del soñador, como dice el amigo Aristos hay quienes destruyen sueños y otros que cada día emprenden nuevos sueños de esperanza.
ResponderEliminarHago votos por éstos últimos, los que desean un mundo mejor y además colaboran en lo que pueden para ello, pequeños granitos de arena que suman en la tarea de construir.
Te dejo mi inmenso abrazo soñador de cosas bellas y buenas para la humanidad querida amiga Isabel!
De acuerdo que los soñadores hacen avanzar el mundo, pero también los emprendedores, nos guste o no. Nuestro presente y nuestro futuro son consecuencia de las acciones de ambos, aunque sea más rica y transcendente la huella del soñador.
ResponderEliminarBesos
Hola Isabel, soñar no cuesta y añade sal a la vida. Vive mas quien sueña, y la vida hay que vivirla de todas las maneras. Una entrada como todas las tuyas, muy interesante, y las fotos no digamos. Un beso.
ResponderEliminarTan acertado, querida Isabel, que llevo días pensando algo así, pero tú lo dices mejor.
ResponderEliminarEsperemos que no nos impidan también sembrar esas semillas.
Un abrazo, te llamo, maravilla.
Sabia reflexión.
ResponderEliminarSaludos
David
Muchas gracias por tu huella Isa querida
ResponderEliminarya corregí el nombre, ups, fue sin querer :)
besitos y abrazos grandes
Feliz fin de semana
Hay muchos mundos distintos, todos en éste: tantos como visiones, seres humanos. Hay quienes viven con las cosas, de las cosas y para las cosas y hay quienes viven del mundo de las ideas, para lograr un crecimiento personal: ésto no está reñido con la participación en la vida social. Las ideas van creciendo a pesar de las lagunas, pero el mundo no progresa. Vivimos una era de decadencia.
ResponderEliminarUn abrazo, amiga.
Paseo entre ruinas del poder que sucumbió. ¿Noto las impotencias de los débiles y las ensoñaciones de los huérfanos?
ResponderEliminarLa piedra. El Arte. El Viaje. El Museo. Ver los viejos poderes y sus empresas, contemplar con una sonrisa en los labios el orín del tiempo en sus delicadas posesiones. Ser el esclavo que dice: recuerda que eres mortal.
Un saludo y que en tus viajes de verano encuentres los llantos de los que, perdiendo, muestran un gesto de sonrisa al ver caer al que arriba era pavo real.
L
Creo que muchos lleváis razón, que lo idóneo es conjugar ambas cosas: sueño y actividad. Otra cosa son los oportunistas, como alguien ha apuntado tan sabiamente.
ResponderEliminarBesos y gracias por vuestros comentarios.
Se ha avanzado mucho en tecnología pero nos falta mucho en la parte más humana.
ResponderEliminarPodemos conquistar el espacio pero no sabemos vivir, equilibradamente.
Bellas imagenes.
Abrazos cariñosos.
donde quedara nuestra cultura? efectivamente los tiempos ¨pasan¨ pero muchos retroceden buscando alcanzar sueños retrocediendo en muchos otros aspectos.
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