ENTRE CHARLAS Y BUENOS DESEOS

Imagen parcial de una sala del Club de Amigos de la UNESCO en Alcoy

El jueves 11 de diciembre viví un encuentro entrañable en Alcoy, en el Club de Amigos de la UNESCO. Allí nos juntamos un grupo de amigos para, previa presentación breve y lectura de algunos fragmentos, charlar sobre tres libros de mi autoría: El nervio de la piedra (poesía), Linaje oscuro (relatos) y Aroma de vainilla (novela). 

   

 Laura del Pozo Alonso y la que suscribe esta entrada

Todo fue calidez en la tarde invernal y se nos pasó el tiempo sin apenas darnos cuenta. Cuando fui consciente de que habíamos estado casi dos horas, me pareció increíble, pero es lo que tiene el encontrarse a gusto, con personas inteligentes y de conversación interesante.

 Emilia Pérez Villaplana, poeta, recitando poemas de El nervio de la piedra

Mi agradecimiento a las personas que propiciaron el acto, que han creído y creen en la bondad de mis letras y que, con su entusiasmo, hicieron de él un momento inolvidable que ya está guardado en mi memoria sentimental: Laura del Pozo Alonso, Amparo Ferrandiz y Emilia Pérez Villaplana.

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Se acercan días especiales para todos: Navidad, fin de año y Reyes. Son jornadas familiares, de encuentros con los amigos, de reflexión y balance sobre el año que concluimos, de perfilar nuevos proyectos para el año que entrará en breve. Son unas semanas que invitan al descanso, a la sociabilidad y a la introspección, pues estos dos últimos conceptos no están reñidos.

Por los motivos expresados, estaré alejada un tiempo del blog.

Que el 2015 os traiga todo lo que deseáis.
Como amante de la literatura que soy y humilde escritora, pido porque no nos olvidemos de leer. La lectura nos hace libres, además de darnos una riqueza intangible, esa que no tiene nada que ver con el tener y sí con el ser. Uno de los mejores regalos posibles es un libro: proporcionaremos horas agradables a los nuestros. Y es que en los libros hallamos no solo entretenimiento, emoción y la posibilidad de ampliar nuestros horizontes, sino también consuelo para nuestro día a día. No se trata tanto de hallar respuestas como de ser capaces de formular las preguntas idóneas, y eso es algo que nos proporciona una buena lectura.

Sin más, ya no me queda más que desearos que todos vuestros sueños se cumplan en el 2015. Que la armonía y la serenidad inunden vuestras vidas.