Porque hoy es hoy, sin foto, sin pintura, sin nada especial que decir o con tanto por decir que no cabe en este formato alocado de lecturas.
Porque, a pesar de los pesares, el tiempo pasa y pesa, nos pasa y nos pesa, al Cobijo y a mí.
Porque unos se van y otros vienen.
Porque me quieren y porque me odian.
Porque supuse que esta aventura era buena y resultó ser buena, aunque aún no sé para qué.
Porque siempre hay un hueco aunque no haya tiempo.
Porque aquí he conocido a auténticos amigos y «otros casos que recordar no quiero».
Porque me gusta leer y me gusta que me lean.
Porque a veces me olvido de que estoy de cara a la galería.
Por todo esto y mucho más, aquí seguimos el Cobijo y yo. Él tan formalito y ordenado. Yo tan dubitativa como siempre: que si suprimo los comentarios, que si ya está bien de blog, que si vaya una mandanga esta con la falta de tiempo, que si me habré olvidado de ver a Fulanito o visitar a Zutanita —que son tan agradables—, que… «Ni contigo ni sin ti, tienen mis males remedio. Contigo porque me matas. Sin ti porque yo me muero». Ya ven, hasta folclórica me pongo… La de vueltas que estoy dando para decir algo tan sencillo como es que hoy es hoy, día de la Almudena, 9 de noviembre, cumpleaños de este bicho que me exige su ración de letras a pesar de que me encuentre disminuida, francamente floja, lo que a mí me fastidia como no pueden figurarse. Pues eso, que ya van seis. ¿Hasta cuándo aguantaremos?
jajajajaja sí que estás folclórica en tus palabras.
ResponderEliminarEnhorabuena y sea para lo que sea, que no es cuestión que importe, sigue con tu blog y con tus letras elegantes.
Yo, si no estás te echo de menos.
Besos.
No sé si te habrá disminuido la uña del dedo meñique, pero el corazón.....NO!!!!!!
ResponderEliminarEstimada Isabel:
ResponderEliminarPara empezar quiero felicitarte por estos 6 años de tu blog que has mantenido con lujo de detalles; ha sido un gran aporte cultural para todos nosotros y, por supuesto, que, en mi caso, siempre estoy pendiente de lo que publicas. Es, en realidad, uno de los pocos blogs que me han cautivado y aquí estoy contigo celebrando esta fecha importante. Creo que todos los que estamos en este mundo de la escritura a través de estas bitácoras nos hemos planteado a veces terminar esta aventura que nos ha permitido comunicarnos con mucha gente, pero, justamente por esto que cabo de señalar, es que quizá nos sobreponemos a los desganos y deseos, a veces, de tirar la toalla. Yo, la verdad, me he planteado cerrar Contrastes y seguir anónimamente con mi poesía pero, siempre hay quien que me anima y decido continuar montado en Rocinante.
Recibe mi abrazo muy grande y un beso muy fraterno y adelante que tu "cobijo" no es del montón.
El 20 de este mes mis pájaros cumplirán tes años. Últimamente voy y vengo, lo que mi salud me permite. A veces cuando me voy también siento un poco de culpa y quisiera cumplir con tantos buenos amigos, pero el cuerpo me pide descanso, hace sus reclamos.
ResponderEliminarFelicidades por tus seis años, Isabel y aunque escribas unos pocos renglones con tus dudas, es siempre un placer leerte porque lo hacés muy bien.
Un abrazo grande.
Ya ves Isabel, que de cosas en seis años; yo tambien me siento reflejado en tus palabras.Cuantas dudas si seguir o no.
ResponderEliminarCuanta gente que viene y va. Y sin embargo, yo que tambien voy ya a por los seis, cada vez tengo mas claro, que ha merecido la pena.
Hay mucha gente que me alegra haber conocido.
Enhorabuena!! por este aniversario y un saludo, desde tus jaras del norte.
Seis años nada menos... Bueno, yo me he sumado hace bien poco. Espero que aguantes otros seis, de momento siempre que pueda echaré un vistazo a todo lo archivado en ese tiempo, que parece ha sido muy fructífero.
ResponderEliminarUn saludo.
Qué vas a disminuir ni qué nada. Tu interior sigue creciendo y con ello mi cariño hacia ti. Adelante, con folclor o sin él, que eres una maga con las palabras. Besos enormes!
ResponderEliminarÁnimo, Isabel. Muy bonito lo que has escrito. Sigue en ello y todo mejorará. Un abrazo
ResponderEliminarComo siempre, me ha alegrado leerte, Isabel. Y no es poco lo que tenías que decir y, además, qué bien dicho, como siempre.
ResponderEliminarDeseo que pasen pronto los días de las penas y te recuperes, aunque confieso que no sé qué males te aquejan, si son de cuerpo o de alma. Desde Toulouse, donde estoy viviendo este otoño, te mando un abrazo cosido de ånimos y buenos deseos. Sursum corda, amiga escritora, a pesar de los pesares, que ya pasarán, aburridos de no doblegarte.
Y porque tú lo vales!
ResponderEliminarBesos Isabel! :)
Pues lo celebras bien, incluso, con imagen nueva de portada. Me alegro de que sigas. No hay duda que a veces cansa y comprendo que dudes, pero no cierres, los blogs tienen mucho que decir y el tuyo más.
ResponderEliminarFelicidades, tocaya, y un fuerte abrazo.
Porque por dudas similares pasamos todos, pasas tú, y paso yo; porque de la duda surge la luz, aquí estamos, a salto de mata con aciertos y desaciertos, con puntualidades y retrasos. ¡Ánimo, esa es la vida misma!
ResponderEliminarBesos.
Vente a la playica y te invito a un bocata jamón al solecico de una terracica con la cervecica bien fresquita. Ya verás como te recuperas en un decir ¡jesús!. Un fuerte abrazo Ah, y para tu compi también, que seguro andará por ahí.
ResponderEliminarMe alegra tu vuelta y comprobar tu buen ánimo pese a esas vértebras rebeldes que te alejan del teclado. Ponte buena y escribe, Isabel, que nos gusta leerte.
ResponderEliminarUn abrazo,
Manuel
A seguir tirando por no aflojar, Isabel, que te sale precioso, sincero, verdadero, ¡¡¡y eso vale!!! Las dudas, las flojeras, el cansancio vital, la antipatía del no saber bien para qué, todo eso es universal, nos sucede a todos, con la vida, con el amor, con los amigos, con el trabajo, hasta con nuestros sueños... Te deseo el bienestar y la felicidad que mereces.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Fer
Pues yo te felicito por estos seis años de cobijo, Isabel Claro, eso es fácil, incluso un tanto egoísta, porque no hago sino beneficiarme de, por, y con tu cobijo... Hum... y, además, para más inri, no soy objetiva... (¿Y cuándo lo eres, Marga?, Jiiiii).
ResponderEliminarTendrás que ser tú, entonces, quien busque en su interior, quien nos oiga -en nuestros quédate- y nos desoiga. Uno ha de hacer lo que debe hacer, decía mi abuelo (claro, lo malo está en encontrarlo: eso no me lo dijo). Desde luego yo, sólo puedo agradecerte el que estés aqui, cobijándome.
No te diré mucho más, o perderé ese mínimo atisbo de imparcialidad que parecía intentar asomar en mi mente-demente... salvo aquello que el sabio aquél, cuyo nombre nunca recuerdo -pobre sabio-, dijo. Lo de que lo más importante, lo interesante... sucede siempre durante el camino...
Abrazotes muy gordotes (que aun en mi eterna y dubitativa dualidad pisciana... en eso no hay duda ninguna)
Seis años no son nada, Isabel.
ResponderEliminarMorirán las bitácoras de versos dulces, y los nuestros seguirán, espartanos, con las mismas dudas de siempre, con los sueños que una vez los hicieron crecer.
Seis años son una medida del tiempo que nos limita la vida; que si fuera comentarios, que si no he visitado, que si tengo los comentarios a cero y todo fue porque no tuve tiempo. ¿Y qué más da? Yo creo que un día llegarán los nuestros, y dirán: qué bonitos recuerdos estos que mi madre plasmaba, o mi tía, o mi abuela, o mi cuñada, o mi vecina. ¿Qué más da?
Tu cobijo es un lugar de sensaciones y a mí me gusta visitarlo de vez en cuando y sentir que sigue vivo.
Un besazo!!
Cómo pasa el tiempo ¿Verdad? Pero hacemos lo que podemos y que no nos falte el buen humor aunque tengamos achaques.
ResponderEliminarGracias por esos seis años de estar con nosotros.
Un abrazo
Sor. Cecilia
Felicidades de corazón, te doy mi enhorabuena y que sigas con tus éxitos en todos los ámbitos. Ojalá dentro de otros seis años y otros veintiséis más, nos sigas deleitando. Sobre todo y lo más importante, que la salud te acompañe.
ResponderEliminarBesos Isabel.
Enhorabuena para ti y para tu Cobijo. Y, sobre todo, salud!
ResponderEliminarNo te preocupes por lo de las visitas. Se va donde se quiere y cuando se quiere o puede. Un abrazo.
Buenos días ya para tí, Isabel. Espero que hayas tenido o estés teniendo sueños lindos, un día después del Cumpleaños de tu hijito virtual "El Cobijo". Creo que él se siente cobijado por una madre que no tiene nada de "Desalmada", al contrario. Siempre se ha mostrado muy tierna y bondadosa con él. Ninguna madre recibe esdesalmada.
ResponderEliminarPienso, al leer tu linda reflexión, que pasabas por un normal estado de ánimo. Todas las personas tenemos altibajos cuando hacemos algo que nos gusta y llevamos tiempo haciéndolo; y se cuentan los cumpleaños, nuestros, de nuestros hijos y de nuestras acciones. Surgen dudas, desánimos y algunos sinsabores, como asomas en tu escrito. Pero ¡ADELANTE! Celebra el sexto aniversario de tu chiquillo con una gran "piñata" de colores, como hacemos en Venezuela y otros países de la Región. Infla globos, trae payasos, haz ricas tortas y sobre todo, elabora la torta de cumpleaños de tu niño. El se ha portado bien. Ha crecido, se ha alimentado con todo lo que Mami le da, creo yo que sin chistar. Dice las cosas lindas que su progenitora le enseña.
Adorna con mil colores a este niño que durante más de un lustro se ha portado tan, pero tan bien con los amigos de su madr
e. ¡Se lo merece!
¡Enhorabuena por esos seis años!
ResponderEliminarY gracias por tu buen hacer, por tu fantástico "cobijo".
Mucho ánimo y salud para otros seis años más por lo menos.
Un abrazo grande
Disfruta del viaje. Si colmas todas tus esperanzas es que nunca soñaste lo suficiente.
ResponderEliminarFelicidades, querida Isabel por esos seis años de Cobijo. Para mi este es un lugar muy querido y espero que siga muchos años más. Date tu tiempo y cuando te apetezca sin mas razón que esa te asomas, lo mas importante es que tú estés a gusto.
ResponderEliminarUn abrazo grande y besos.
Seis años de un blog que ha ido avanzando positivamente y que se ha hecho grande porque es el reflejo de las manos que lo alimentan. Eres una extraordinaria escritora y una gran persona. Abrazos siempre.
ResponderEliminarFelicidades. Y en cuanto a tu cita"...y resultó ser buena, aunque aún no sé para qué." he ahí la bondad en su esencia: el desinterés. Un abrazo
ResponderEliminarMuy bueno, Isabel; me has hecho reír. :D
ResponderEliminarTe pasa como a mí con Facebook. Que si sí, que si no, que si ahora te quiero y luego te odio. Al final durará lo que tenga que durar ;)
Un abrazo grande, grande.
y eso que estas floja....disminuida dices...un placer verte en esos requiebros contigo misma...da gusto ver como te enfrentas al mundo y a tu mundo...la peonza sigue girando...fuerte abrazo
ResponderEliminarHola, Isabel, lo importante es que disfrutes con lo que hagas. Creo que ya nos conocemos lo suficiente y que dosificamos las lecturas por lo blog, que no hace falta que nos comentemos, que basta con dar al "me gusta" de fb para saber que nos leemos, que no tenemos porque leernos todo de todos. En fin, que se cure tu espalda y que mantengas abierto el blog, dando señales al menos una vez al mes, y que a ver cuando vuelves por Madrid.
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